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| Juan Mata, jugador de la selección olímpica de fútbol, tras perder contra Honduras |
En los Juegos Olímpicos de Londres 2012 España está mostrando la cara y la cruz de su moneda. Mientras los representantes españoles "triunfan" en algunos deportes, en otros han pasado sin pena ni gloria o han terminado defraudando.
La mayor decepción, la de la selección olímpica de fútbol, que perdió su segundo partido contra Honduras 0-1. Al haber perdido también su primer partido contra Japón, la Rojita queda matemáticamente eliminada de los Juegos Olímpicos de Londres.
La cara
En la cara de la moneda encontraríamos a la España ganadora. La podemos ver en baloncesto, balonmano, waterpolo y voleibol (masculino y femenino).
En baloncesto, España ganó a China en un partido más complicado de lo que finalmente reflejó el marcador (97-81). La figura de Paul Gasol resaltó en el partido, con 21 puntos, 11 rebotes y 4 asistencias del ala-pívot. Serge Ibaka acompañó con 17 tantos, 5 capturas y 3 tapones que diseminaros el miedo del ataque asiático. Navarro evidenció su mejoría en un cuarto parcial en el que la salida de Sergio Rodríguez volteó la dinámica trabada del enfrentamiento. Yi Jianlian complicó la vida de los hombres altos de España. El pívot regaló una lección de fuerza con mates inverosímiles, pero también realizó lanzamientos lejanos producto de una muñeca sensacional. El duelo anduvo parejo hasta que el acierto en el triple distanció a España en el segundo parcial (un 58% de aciertos).
En balonmano, España encarriló la victoria después del descanso y consiguió ganar a Serbia (26-21). Con una dura defensa, el acierto de Hombrados y una alta efectividad en las contras, los chicos de Valero Rivera acabaron con todas las dudas que sobrevolaron el Cooper Pabillion en los primeros 30 minutos. Antes del descanso, el combinado español había sufrido la lesión de Sterbik y el acierto de un Stankovic que anotó y asistió a partes iguales gracias a los numerosos huecos que dejaba la defensa de España.
En waterpolo, la selección española cumplió con las expectativas y liquidó su debut por la vía rápida. Los hombres de Rafa Aguilar hicieron valer su superioridad técnica desde el primer minuto y se llevaron una cómoda victoria (6-14) que les permite cargarse de moral de cara a los importantes compromisos que le quedan por delante. Croacia, próximo rival de España, venció con apuros a Grecia (6-8).
En voleibol masculino, los españoles se impusieron a los checos en dos sets, 25-23 y 21-16. La pareja formada por Pablo Herrera y Adrián Gavira se impuso en 41 minutos a los checos Premysl Kubala y Petr Benes. El saque directo de Gavira, cercano a los 86 km/h, ultimó el primer set. Fue el punto que desatascó un partido en el que los checos habían disfrutado de dos puntos de set.
En voleibol femenino, Liliana Fernández y Elsa Baquerizo han protagonizado la sorpresa en el debut de la pareja española en unos Juegos Olímpicos (primera vez que unas españolas participan en voley playa) al imponerse a la pareja holandesa, vigentes campeonas de Europa, por 14-21, 21-16 y 15-11. El éxito de las jugadoras españolas se cimentó en el saque, donde consiguieron seis puntos directos y en una capacidad de lucha encomiable.
La cruz de la moneda española la protagonizaron Sugoi Uriarte y la Selección Olímpica de Fútbol.
En judo, Sugoi Uriarte se quedó a las puertas de conseguir el bronce en -66 Kg, que hubiese supuesto además la primera medalla para España en los Juegos de Londres. El combate ante el surcoreano Jen-Ho Cho fue tan igualado que fueron los tres árbitros quienes tuvieron que decidir tras el punto de oro quién era el ganador. Al final no pudo cumplir su sueño de dedicarle una medalla olímpica a su madre, fallecida hace casi un año y medio.
Pero sin duda la mayor sorpresa y el mayor tropezón fue el de la Selección Olímpica de Fútbol, que perdió su segundo partido contra Honduras (0-1). Clara polémica, ya que el árbitro venezolano Juan Soto no pitó dos penaltis, siendo uno de ellos clarísimo.
Aunque el metal parecía asegurado, la selección olímpica se marchará de los Juegos de Londres con otro tipo de medalla colgada al cuello, la del infortunio. España volvió a perder, esta vez contra Honduras (con gol de Bengtson en el minuto 7), y se quedó sin opciones de estar en cuartos una jornada antes del final de la fase de grupos. La Rojita se marchó mandando tres balones al palo. Además, el colegiado no ayudó nada al no pitar dos penaltis favorables a España y a pitar falta en contra cada vez que un jugador de Honduras se tiraba al césped.
En baloncesto, España ganó a China en un partido más complicado de lo que finalmente reflejó el marcador (97-81). La figura de Paul Gasol resaltó en el partido, con 21 puntos, 11 rebotes y 4 asistencias del ala-pívot. Serge Ibaka acompañó con 17 tantos, 5 capturas y 3 tapones que diseminaros el miedo del ataque asiático. Navarro evidenció su mejoría en un cuarto parcial en el que la salida de Sergio Rodríguez volteó la dinámica trabada del enfrentamiento. Yi Jianlian complicó la vida de los hombres altos de España. El pívot regaló una lección de fuerza con mates inverosímiles, pero también realizó lanzamientos lejanos producto de una muñeca sensacional. El duelo anduvo parejo hasta que el acierto en el triple distanció a España en el segundo parcial (un 58% de aciertos).
En balonmano, España encarriló la victoria después del descanso y consiguió ganar a Serbia (26-21). Con una dura defensa, el acierto de Hombrados y una alta efectividad en las contras, los chicos de Valero Rivera acabaron con todas las dudas que sobrevolaron el Cooper Pabillion en los primeros 30 minutos. Antes del descanso, el combinado español había sufrido la lesión de Sterbik y el acierto de un Stankovic que anotó y asistió a partes iguales gracias a los numerosos huecos que dejaba la defensa de España.
En waterpolo, la selección española cumplió con las expectativas y liquidó su debut por la vía rápida. Los hombres de Rafa Aguilar hicieron valer su superioridad técnica desde el primer minuto y se llevaron una cómoda victoria (6-14) que les permite cargarse de moral de cara a los importantes compromisos que le quedan por delante. Croacia, próximo rival de España, venció con apuros a Grecia (6-8).
En voleibol masculino, los españoles se impusieron a los checos en dos sets, 25-23 y 21-16. La pareja formada por Pablo Herrera y Adrián Gavira se impuso en 41 minutos a los checos Premysl Kubala y Petr Benes. El saque directo de Gavira, cercano a los 86 km/h, ultimó el primer set. Fue el punto que desatascó un partido en el que los checos habían disfrutado de dos puntos de set.
En voleibol femenino, Liliana Fernández y Elsa Baquerizo han protagonizado la sorpresa en el debut de la pareja española en unos Juegos Olímpicos (primera vez que unas españolas participan en voley playa) al imponerse a la pareja holandesa, vigentes campeonas de Europa, por 14-21, 21-16 y 15-11. El éxito de las jugadoras españolas se cimentó en el saque, donde consiguieron seis puntos directos y en una capacidad de lucha encomiable.
La cruz
La cruz de la moneda española la protagonizaron Sugoi Uriarte y la Selección Olímpica de Fútbol.
En judo, Sugoi Uriarte se quedó a las puertas de conseguir el bronce en -66 Kg, que hubiese supuesto además la primera medalla para España en los Juegos de Londres. El combate ante el surcoreano Jen-Ho Cho fue tan igualado que fueron los tres árbitros quienes tuvieron que decidir tras el punto de oro quién era el ganador. Al final no pudo cumplir su sueño de dedicarle una medalla olímpica a su madre, fallecida hace casi un año y medio.
Pero sin duda la mayor sorpresa y el mayor tropezón fue el de la Selección Olímpica de Fútbol, que perdió su segundo partido contra Honduras (0-1). Clara polémica, ya que el árbitro venezolano Juan Soto no pitó dos penaltis, siendo uno de ellos clarísimo.
Aunque el metal parecía asegurado, la selección olímpica se marchará de los Juegos de Londres con otro tipo de medalla colgada al cuello, la del infortunio. España volvió a perder, esta vez contra Honduras (con gol de Bengtson en el minuto 7), y se quedó sin opciones de estar en cuartos una jornada antes del final de la fase de grupos. La Rojita se marchó mandando tres balones al palo. Además, el colegiado no ayudó nada al no pitar dos penaltis favorables a España y a pitar falta en contra cada vez que un jugador de Honduras se tiraba al césped.
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